Creemos que es necesario promover una transición energética hacia un modelo sostenible que, en nuestro sector de actividad, debe estar fundamentada en reducir el consumo de energía y el impacto ambiental en todas las etapas de la vida de un edificio, desde su construcción hasta su uso, mantenimiento y derribo. Sabemos que el uso de las viviendas es generador de aproximadamente el 30% de las emisiones de CO2 del país, y que este consumo de energía durante su uso supone el 75% de las emisiones que produce un edificio en toda su vida útil. Por ello, es primordial un modelo escalable de construcción y gestión que permita el control de los consumos energéticos ya la vez la implantación de instalaciones de energías renovables. 

El modelo de vivienda cooperativa, por sus características intrínsecas, presenta varias ventajas que facilitan este modelo.

1. Autopromoción. Son las personas que vivirán allí las que toman las decisiones durante la construcción del edificio, y por eso, son las primeras interesadas en implementar todas las medidas de ahorro energético y de captación pasiva de energía que se puedan dotar, tanto por el su retorno económico como ecológico. Este hecho no está exento de contradicciones y tensión, en el equilibrio que deben buscar las socias entre el esfuerzo económico de la inversión inicial y el retorno a medio-largo plazo.
2. Vida común. El compartir, consustancial al cooperativismo, es ya un factor de sostenibilidad. Las promociones de Sostre Cívic constan de viviendas más bien pequeñas, pero se dotan de espacios colectivos amplios y polivalentes como extensión de los espacios privativos, que tienen un uso intensivo y más eficiente. En todos los proyectos se implantan instalaciones centralizadas y colectivas, que utilizan exclusivo energías renovables, que son más económicas y eficientes. En definitiva, se busca bienestar colectivo compartiendo espacios comunes, instalaciones, recursos, etc.
3. Participación y gestión colectiva. Las socias y socios se implican tanto en el diseño y construcción, como en el uso del edificio. Ésta es una ventaja respecto a la promoción convencional, ya que los proyectos:
   1. Se adaptan a sus necesidades reales de las usuarias, con un estándar de confort bueno, pero que a su vez es austero si lo comparamos con otros.
   2. Están pensados ​​para ir modificándose y creciendo en el tiempo, lo que facilita que el edificio pueda ir mejorando y adaptándose a los nuevos retos que pueda suponer el futuro incierto de cambio climático, son proyectos resilientes. 
   3. Están monitorizados y gestionados por las mismas usuarias que, en tanto que co-propietarías, se implican en la reducción del consumo y la mejora continua de las instalaciones y el edificio.

Sostenibilidad ambiental en Sostre Cívic

La sostenibilidad medioambiental ya estado de los pilares de la cooperativa desde su nacimiento, y así aparece recogido en los Estatutos Sociales de la entidad (artículo 8). Sin embargo, en 2020 el Consejo Rector aprobó el libro de criterios arquitectónicos de Sostre Cívic, donde, entre otros aspectos, se determina que todos los proyectos de obra nueva o gran rehabilitación de la cooperativa tendrán la calificación energética A, estableciéndose criterios de reducción de impacto ambiental y de salud de los materiales de construcción. 

En este sentido, durante el año 2022 y gracias a Proyectos Singulares, hemos desarrollado una nueva línea de actividad para impulsar las energías renovables, las instalaciones eficientes y la gestión cooperativa de los consumos en nuestros proyectos de vivienda cooperativa. Las primeras acciones realizadas han sido:

1. Creación de una oficina técnica para la implantación y gestión de las instalaciones centralizadas de energías renovables de los proyectos de vivienda cooperativa. 
2. Incorporación de nuevas herramientas para la gestión económica servicios asociados a los consumos y suministros de los edificios.
3. Digitalización de la producción y el consumo de energía a través de la implantación de un sistema de monitorización de las instalaciones. Esta actuación nos permite efectuar una gestión cooperativa tanto de la producción como de los consumos en cada proyecto, así como efectuar un control y análisis exhaustivo del consumo, con el objetivo de establecer patrones de mejora, optimización y ahorro en el uso de las instalaciones, tanto por las comunidades como por cada una de las viviendas, promoviendo el consumo responsable de energía y recursos.
4. Creación, como prueba piloto, de una Comunidad Energética Local como fórmula innovadora de producción de energía renovable y autoconsumo colectivo, generando impacto y empoderamiento energético en la comunidad y en personas externas a la cooperativa.

Un proyecto con el apoyo del programa Proyectos Singulares

Este proyecto ha sido posible gracias a haber sido beneficiarios del programa Proyectos Singulares 2021 con el proyecto "Producción, autoconsumo y digitalización de energías renovables en la vivienda cooperativa".

La convocatoria de los Proyectos Singulares tiene por propósito generar empleo a través de la creación de nuevos proyectos empresariales, nuevas líneas de negocio, nuevas empresas y nuevos mercados en el marco de la economía social y cooperativa y aprovechando oportunidades estratégicas del propio sector de actividad o del territorio.

Esta subvención está en el marco de la Economía Social, y es promovida por el Departamento de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalidad de Cataluña, con la financiación del Ministerio de Empleo y Seguridad Social del Servicio Público de Empleo Estatal.