1.07.2020

Empecemos las obras del proyecto Cirerers en Barcelona


Queremos adelantarnos al Día Internacional del Cooperativismo, que tendrá lugar el próximo 4 de julio, ¡con un ejemplo de éxito de intercooperación! La vivienda cooperativa en cesión de uso sigue creciendo en Barcelona con el inicio de obras de Cirerers, nuestro segundo proyecto de obra nueva, después de iniciar en septiembre de 2019 la construcción de La Balma.

Casi la totalidad de las empresas que colaboran para hacer realidad este proyecto son cooperativas de la economía social y solidaria: arquitectura, ingeniería, promoción, construcción, gestión grupal, financiación y seguros… y muchas de ellas forman parte del Grupo ECOS, del que somos socias, como Arç o Celobert!  


Cirerers es vivienda colectiva y social 

El proyectar Cirerers se ubica en la Plaza de las Mujeres de Nou Barris y será un edificio de 8 plantas con 32 viviendas y espacios comunitarios que se ha definido de forma participativa entre el equipo técnico de arquitectos de Celobert y el grupo de personas que vivirán allí, con la intención de resistir a la pérdida de la vida en comunidad generada por la mercantilización.

Carmen Perales, una de las socias que impulsan Cirerers, afirma que “se quiere crear una red de soporte mutuo que permita una vida comunitaria, autogestionada y asamblearia. Actualmente nos reunimos en asamblea y trabajamos para fortalecer un modelo alternativo de acceso a la vivienda y una vida comunitaria arraigada en barrio y en las personas.” 

Diego Carrillo, arquitecto del proyecto, destaca que “el edificio está pensado desde una lógica comunitaria y por eso dispone de una calle-replano en cada planta, donde las usuarias podrán salir, jugar o tender la ropa. También cuenta con espacios interiores comunitarios en planta baja, abiertos en el barrio y en la plaza, tal y como se muestra en el esquema adjunto. 

Por último, Estel Andreu, otra participante de Cirerers, asegura que este proyecto “es la semilla de un modelo alternativo de acceso a la vivienda en nuestra ciudad. Queremos tejer y recuperar redes que nos permitan una vida en común más libre de puertas adentro y puertas afuera”. 


La vivienda cooperativa: un impulso por el mercado social catalán

Gracias a su dimensión, las promociones de vivienda cooperativa en cesión de uso impactan en muchos ámbitos de la economía social y solidaria y contribuyen a crear un auténtico mercado social catalán, que pueda resolver todas las necesidades sin pasar por la economía capitalista.

Con esa idea nació, por ejemplo, La Constructiva, la primera cooperativa sin ánimo de lucro orientada a la construcción de viviendas cooperativas en cesión de uso, y que actualmente se encarga de la construcción del edificio Cirerers. Pero son otras muchas las entidades que también participan en este proyecto: Celobert se encarga del diseño arquitectónico y la dirección de las obras, Arç de los seguros del edificio y obras, Matriu del acompañamiento grupal, el Col·lectiu Ronda del asesoramiento legal, Gestió Integral del apoyo en el ámbito económico y fiscal, y todo ha sido posible gracias a la financiación otorgada por Fiare Banca Ètica

La intercooperación es básica para hacer realidad proyectos tan complejos y grandes como la construcción de un edificio. Sostre Cívic, Celobert i Arç  ya participábamos previamente del grupo cooperativo ECOS, una iniciativa formada por empresas de la economía social y solidaria de diferentes sectores y que tiene como objetivo fortalecer y desarrollar las organizaciones socias.


Sostenibilidad y eficiencia energética

El cooperativismo de vivienda en Cataluña es pionero en la promoción de edificios plurifamilares ecológicos y de mínima demanda energética. El material que se utiliza en Cirerers es principalmente la madera, también el mortero de cal en las fachadas y placas de yeso en los interiores. Todos ellos son materiales biodegradables y de baja huella ecológica, ya que su producción, transporte y reciclaje conlleva muy pocas emisiones de CO2.

“El proyecto de Cirerers dará un paso adelante en innovación constructiva y será el edificio de madera más alto del estado, con 8 plantas” afirma el arquitecto Diego Carrillo. Esto confirma, una vez más, el compromiso del cooperativismo de vivienda con la innovación social y medioambiental, que en 2018 ya fue capaz de promover el edificio de La Borda, en el barrio de la Bordeta de Barcelona, ​​de 7 plantas, también de madera y que ya está habitado.